Página personal

Los enfoques diferenciadores de la fuerza muscular

Los objetivos que se persiguen mediante la ejecución de ejercicios de fuerza muscular y, en consecuencia, la metodología utilizada van a depender del contexto en el que se desarrollen. Los fines son muy distintos para cada caso. Por ejemplo, un culturista pretenderá obtener una musculatura fuerte y definida, de la forma más simétrica posible. Un deportista que practique la halterofilia enfocará su preparación al levantamiento de la mayor carga posible, dentro de su categoría y con la técnica más eficaz. Estas situaciones son claramente distintas al enfoque que tiene una persona que se encuentra en pleno proceso de rehabilitación muscular, tras haber sufrido una operación o bien una inmovilización durante varios meses. Del mismo modo, los integrantes de grupos de mantenimiento realizan los ejercicios de fuerza muscular con el objeto de provocar una tonificación general, dentro de una programación de ejercicos saludables. En otros contextos deportivos se provocan situaciones también muy diferenciadas. Por ejemplo, un velocista aplicará la fuerza para propiciar una buena aceleración y mantenimiento del ritmo de carrera. Sin embargo un pertiguista intentará conseguir la máxima altura posible de su centro de gravedad, tras doblar el implemento, lo que exigirá también grandes dosis de fuerza. Por su parte, un lanzador transmitirá su máxima fuerza explosiva hacia un implemento con la intención de arrojarlo lo más lejos posible. Todas estas situaciones son meros ejemplos que denotan la gran diversidad metodológica y objetivos diferenciados de esta importante capacidad condicional.
 

Buscar en el sitio

© 2013 Todos los derechos reservados.